miércoles, 29 de septiembre de 2010

....

en lo más profundo de mi corazón el odio vuelve a acechar en cada latido.
Muy en el fondo, ahí enterrado a la nada, hay algo que quiere salir fuera, que quiere acabar con todo. Destrucción, sangre, lamentos, odio, odio profundo. Estoy cansada de aguantar siempre toda la mierda que me echan, estoy cansada de tener que ser siempre la persona que está ahí para todos, para todo, la que el mundo cree que no tiene problema alguno. ¿Es que acaso se tiene que gritar a los cuatro vientos de que te estás muriendo para que la gente se de cuenta? ¿Es que acaso hay tan poco interés hacia mi persona que solo pueden darse cuenta de que sufro cuando lo digo? ¿Es que todo tiene que dolerme tanto hasta el punto de querer acabar con todo?
Ya me he cansado de llorar.
Ya me he cansado de decir y de mostrar que no estoy bien.
Para que, me pregunto, para qué.

¿DE QUE COJONES SIRVE?!
¿A CASO AYUDA EN ALGO?
¿A CASO ALGO MEJORA?
¿A CASO SOY FELIZ?
¿A CASO SIRVEN DE ALGO MIS ESFUERZOS?
¿ES QUE NADIE ES CAPAZ DE LUCHAR POR MÍ?
¿ES QUE SOLO PUEDO ESCUCHAR PALABRAS BONITAS CUA
NDO SOY YO QUIÉN INCANSABLEMENTE LUCHA PARA LA FELICIDAD DE LOS DEMÁS?

A la mierda. Simplemente, a la mierda. A la mierda. A la mierda.
Estos sentimientos van a desvanecerse, al igual que todas estas lágrimas derramadas.
La pena va a convertirse en rábia.
Los llantos van a convertirse en risa malevola.
Las ganas de ayudar y de ser buena persona van a ser cambiados por falsas sonrisas y palabras vacías y esperanzadoras, que, cuando os deis la vuelta, voy a apuñalaros por la espalda, como todo el mundo ha hecho conmigo.
Se acabó.

Jamás, repito.
Jamás, voy a volver a luchar por nadie.
Jamás, jamás voy a volver a preocuparme por nadie.
Jamás, jamás de mi boca va a volver a salir "te quiero".
Jamás, jamás voy a volver a ser la persona que siempre he sido.
Un cambio, un cambio radical.
Para siempre, mis buenos sentimientos van a ser enterrados bajo tierra, en lo más profundo de esto al que le llamo corazón.
Para siempre, para siempre.
Olvidaos de la persona que una vez conocisteis.
Olvidaos de pedirme ayuda nuevamente.
Olvidaos de recibir un cariño verdadero.
A partir de ahora mis abrazos van a llevar por delante mentiras.
A partir de ahora mis orejas van a escuchar sin preocuparse.
A partir de ahora no habrá cobijo que pueda dar.
A partir de ahora no habrá ningún "te quiero" real.
A partir de ahora, lo único que va a salir de mí, será odio, odio y más odio.
Para siempre me despido.
Para siempre, adiós.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Silencio

Silencio, a veces es la mejor opción.
Silencio, esconde tus penas, que importa, quién va a escucharlo.

Silencio, es quién al final tiene razón,
silencio, es el único ganador,
silencio, te callas las palabras,
silencio, es quién al final manda.
Y dime, que importa, todo lo que digas,
dime que importa que sufras y lo finjas,
que importa si al final, nadie te hace caso,
que importa si total, no existen los milagros.
Sufres, lloras, caes y te estancas,
Ansiedad, lamentos y muchas caidas varias,
no importa, tu sabes, que nada tiene sentido
si al final el silencio es tu único amigo.
No entiendo porque tantas veces he llorado para nada,
contando todas mis penas, contando mis ralladas,
si al final todo el mundo piensa por si mismo,
si al final nada de lo que hagas tiene algún sentido.
No importa cuanto luches, no importa lo que te esfuerces,
haz lo que creas, al final nadie te merece,
que los lamentos que te atormentan,
son quiénes te acompañan,
que las palabras de los otros, son simples patrañas.
Y grita, llora, lamentate de todo!
Escupele a la vida, que se trague tu saliva!
y grita, que nada te reprima!
Destroza, pega,revelate a la vida!
Pero al final, sabes, que van a criticarte,
que si dices las verdades van a atormentarte
que la vida no está preparada para saber la verdad,
todo esta escondido entre suciedad y falsedad.
A veces te das cuenta de que no hay sitio en este mundo,
en este mundo para tí, en este mundo de incultos,
que ser inteligente ya no es un don decente,
ser inteligente es la puerta hacia la muerte.

Dicen que el tiempo pone a todo el mundo en su lugar,
pero dime, que es lo cierto, que está bien y que está mal,
todo depende de la prespectiva,
todo cambia siempre según como lo miras.
Entonces dime, ¿hablar o estar callado?
¿decir una mentira o contar lo que ha pasado?
No importa, sabes, que nadie va a creerte,
no importa lo que piensen, que más da lo que te quejes.
Callarse a veces es la mejor opción,
aunque te puedan exigir dar una explicación,
no caigas en sus redes, no hagas ningún caso,
lo que dicen los demás yo simplemente paso.
Porqué se que cada uno piensa lo que quiere,
¿intentan ayudarte o intentan convencerte?
Supongo que cada uno sigue su camino,
no importan lo que digan, no existe ningún destino,
cada uno sigue el curso que la vida le ha exigido,
tratas de cambiarlo, de cambiar lo que has vivido.

Y a veces me pregunto si estoy equivocada,
a veces me pregunto si vivo engañada,
a veces me pregunto si son solo palabras,
las que crean los errores o las que no sirven de nada.
Y de nuevo vuelves a la misma pregunta:
decir lo que piensas o aguantar toda la culpa,
de lo que piensen los demás si guardas las verdades
de lo que dirán los otros, de los complejos sociales.
Miente, llora, sonrie y no caigas,
finge, lucha, y no creas en nadie.
torturate, pues al final, ya que coño importa,
digas lo que digas, todo son mentiras.
Ya no creo en nada, ya no creo en nadie,
ya nada importa en este mundo sin verdades,
ya no quiero nada, ya no quiero ver,
lo que la realidad esconde, es difícil de creer.
Por eso me despido, de este mundo sin sentido,
por eso seguiré en este mundo del olvido.

Silencio...

Perfeccionismo

Nunca he sabido por qué razón busco el perfeccionismo en todo lo que me rodea, si jamás he tenido nadie que me inculcara estos pensamientos. Supongo que aunque nadie te lo diga, llega un momento en tu vida que te detienes a pensar y dices qué coño estás haciendo con ella. Por qué nada sale como esperas que salga, miras hacia atrás, y recuerdas los planes que tenías cuando aún eras un crio. Planes, tal vez surrealistas, planes que ni siquiera sabias como llevarlos a cabo, porqué no eran más que sueños. Incluso a veces, miras hacia atrás y te das cuenta que jamás has tenido nada por lo que luchar. Que siempre te has conformado con todo, con lo que tienes, con lo que toca, y aunque desearas tener más, jamás has luchado para conseguirlo. Es entonces cuando te das cuenta de que algo tiene que cambiar. De que para que algo vaya mejor tienes que superarte. Pero a veces esas ganas, esa meta que te impones va demasiado encima de tus capacidades, ves como puedes conseguirlo por poco tiempo pero enseguida caes de nuevo, y tal vez, ni siquiera estás dónde estabas antes de empezar, sino aún peor.

¿Por qué buscar el perfeccionismo me pregunto? ¿Por qué querer conseguir algo fuera de tu alcance si sabes que no vas a lograrlo?
Supongo que a base de sueños vivimos, a base de proponernos metas y querer conseguirlas lo más rápido posible. Ver efectos inmediatos, cuando toda tu vida es una mierda. Ver como algo mejora, ver cómo puedes sonreír por algo, algo en lo que te estás esforzando. Pero al igual que puedes obtener una gran felicidad, está justo al lado de la desgracia, justo ahí, cogida de su mano. Te despistas un momento, la felicidad se marcha y aparece su hermana gemela. Todo se nubla. Las ganas de todo desaparecen, aún te vuelves más ambicioso, quieres aún más perfección, cuanto más lejos la ves, más la deseas, sin darte cuenta que poco a poco te estás autodestruyendo.

Hace tiempo me di cuenta que he perdido la razón por el cual estoy aquí ahora mismo. Sinceramente, no hay ninguna. Busco, miro, y sé que las metas que me propongo no las consigo. Trato de intentarlo, pero todo es en vano. El perfeccionismo que querido lograr durante largo tiempo, después de tanto esfuerzo, me hace ver que me ha destrozado la vida.

¿Para qué querer ser perfecto? ¿Para qué? Si al final te quedas vacio, sin nada. ¿Para qué soñar con algo que no sabes si podrás lograr? ¿No sería más fácil proponerse metas sencillas?
Supongo que, cuando una vida está tan podrida y no hay ninguna motivación latente, buscas en una sola cosa la mayor perfección del mundo. Y es imposible.
Es imposible… lograrlo.
Y es imposible, que algo sea perfecto.
Aún y sabiendo esto, sigo buscando la perfección.

martes, 27 de octubre de 2009

Be Strong

No siempre es fácil vivir. Es más, pasamos más tiempo de nuestra vida lamentándonos de lo que no tenemos o no podemos obtener, que nos aleja de el sueño humano preferido: ser feliz.
Pero de las caidas y los errores se aprende. Y que sucede cuando a pesar de pasarlo realmente mal, a pesar de caernos desde un abismo, ¿no logramos ver cuál fue nuestro fallo y de nuevo cometemos el mismo error? Bien, eso también es una característica humana. Nuestro cerebro aleja los momentos más duros de nuestra vida, para resguardar tan sólo los buenos. Es un hecho. Aunque hay veces que es imposible olvidar el dolor por el que hemos sufrido. O tal vez, sentir esa melancolía que tanto odiamos sentir. Esa sensación de peso en el pecho que no podemos alejar por más que tratemos de dibujar una sonrisa en nuestro rostro. Pero lo que no mata nos hace más fuertes. El camino hacia la felicidad es un camino duro, costoso, al cual sólo pueden empezar a ver los que realmente desean ser felices. Y no sólo se trata de desearlo, sino también luchar por ello.
Muchas veces en mi vida me he detenido en este largo camino y he pensado: "¿Dónde estoy? ¿Quién soy realmente? ¿Qué debo hacer ahora?" Y a pesar de pensarlo, pensarlo y pensarlo, soy incapaz de encontrar respuesta alguna. Pero las personas complicamos más las cosas de lo que realmente parecen ser. En verdad no es tan duro. ¿Por qué entonces con gran facilidad logramos ver lo bueno que tienen los otros y no lo nuestro? Simplemente por el hecho de que no tenemos sentimientos respecto a esa otra persona. Respecto a lo que esa persona está viviendo. Desde fuera todo se ve más claro. Y si pudieramos ver nuestra vida desde fuera, seguramente no sería tan complicado vivir. No, ni de lejos.
Pero no tengo, no DEBO detenerme ahora. Aunque no sepa dónde estoy. Aunque no sepa quién soy. Aunque no sepa que debo hacer. Tengo que seguir adelante a pesar de cualquier adversidad. Conseguir la felicidad no es trabajo de un sólo día, al igual que no podemos pretender que solamente con construir una empresa al día siguiente seamos la persona más rica. Al igual que querer augmentar nuestras habilidades, no vale con practicar una vez hasta la saciedad. Sino aplicar esto cada día. Cada día de nuestra vida.
No siempre es fácil vivir, incluso a veces deseariamos estar muertos. Deseariamos dejar los sentimientos a un lado y vivir como simples marionetas. Pero entonces, ¿de qué serviría todo lo que estamos pasando? ¿de qué? Si después no podriamos sentirnos bien después de levantarnos de un duro golpe. Porqué los sentimiento están todos juntos. No podemos dejar uno a un lado y querer otro. Es imposible.
Luchar, luchar, luchar es lo único que podemos hacer. Porqué a veces, aunque parezca que nuestro corazón vaya a desvanecerse, aunque parezca que el sufrimiento no tiene fin... La sensación de superar todos esos momentos, ¿no es suficiente gratificante como para alejar todo el dolor que hemos pasado? No sabemos cuando llegará nuestra recompensa. Pero llegará. Algún día. Mientras tanto sólo se puede... luchar.

martes, 7 de julio de 2009

Cuando todo es oscuro...
Cuando la soledad se hace cargo de mi alma,
haciendo que cada latido de mi corazón sea vacio,
cuando en mis lamentos ya no queda nada.

Cuando creo que todo esta perdido,
que el significado de la esperanza es olvido,
cuando creo que ya no hay nada de lo que he vivido...

Cuando la vida me envuelve con un velo oscuro,
haciendome creer que ya no hay nada,
cuando mis lágrimas derraman sobre esta almohada,
cuando es silencio el que se hace dueña de mi alma.

Cuando ya no hay amigos,
que puedan despertar un rayo de felicidad,
cuando ya no hay nadie
que pueda sacarme de esta soledad...

Cuando hasta el punto más alto
queda enterrado bajo arena,
cuando la radiante luz de luna
queda insignificante ante unas negras velas.

Cuando la sonrisa que antes me alegraba
desaparece entre estas paredes,
cuando las felices noches de estrellas
quedan disueltas entre estas redes.

Cuando todo esto y más
hace que las lágrimas no puedan ser contenidas
lágrimas de dolor...
lágrimas que duelen como espinas.

Sin embargo, aún sigo esperando
que algo o alguien me saque de aquí.
Sin embargo, es esta la vida...
que me ha tocado vivir.

Esperar...
Luchar...
Llorar...
Esconderme...

¿Cual es la realidad?

Hace tiempo que esperaba a la muerte sentada,
aunque ahora sigo de pie este camino.
sigo de pie...
aunque todo esté perdido.

domingo, 28 de junio de 2009

In A Dark Way

Y la oscura noche abarcó en sus ojos. Dejando que ningún rayo de luz penetrara en su interior. Poco a poco, su vida se desvanecía, al igual que cuando intentas atrapar el agua con tus manos y se vierte al suelo, dejando tus manos húmedas, recordando que hace unos segundos podías tocar el agua. Pero al final, es sólo eso, un momento efímero, cómo la felicidad. Nada permanece en su original estado, todo sigue su curso.

No había ninguna puerta que estuviera abierta, y el camino era tan oscuro, que ni siquiera podía con sus manos palpar la pared, para guiarse. No había indicios de supervivencia en ese lugar.
Y, ¿como podía pedir ayuda sin que nadie entrara en su vida? No quería arruinar el camino de los demás, o más bien dicho, sabía que cada uno debía seguir su propio camino. ¿Que culpa tenía que el suyo fuera tan oscuro? ¿Y si se rendía? Hay personas que no son lo sufientemente fuertes como para aguantar tal peso. Y lo sabía. Sabía que no podía. Pero también tenía miedo a morir. O tal vez, miedo de no saber que podía pasar si no seguía. Siguió su camino, oscuro y sin fuerzas, en busca de alguna luz. ¿La encontraría? No lo podía saber. De todos modos, era demasiado débil como para esperar a la muerte en el suelo.

sábado, 20 de junio de 2009

Pensamientos.

Otra vez de nuevo, la noche cae en mis ojos.
Otra vez de nuevo, esas raras preguntas vuelven a invadir mi mente.
¿Quién soy?
¿Que hago aquí?
La verdad, hace tiempo que he perdido el interés por encontrar respuesta, ya que soy incapaz de hacerlo.
Pero hay veces que, cómo hoy, el dolor se hace dueño de mi corazón, haciéndose cada vez más y más pesado.
¿Estoy bien?
No lo sé.
También he perdido el interés de encontrar la respuesta a esa pregunta.
¿Qué es lo que me hace sentir así?
Supongo que ser humana. Todo el mundo se siente así alguna vez.
Ni siquiera tengo ganas de llorar, no creo que sea necesario.
No me siento mal, pero tampoco bien.
Ya estoy acostumbrada a soportar este peso en mí misma.
Son tantos meses los que han pasado que mi corazón dejó de latir con tanta intensidad, que ya me he acostumbrado a sentirme así.
Si, supongo que es algo habitual.
Escribo sin pensar.
Escribo sin buscar respuestas.
Escribo sin esperar que nadie me entienda.
Cómo siempre.
La oscuridad vuelve a ser dueña de este corazón.
La noche vuelve a posar sobre mis recuerdos.
El frío se adueña de este cuerpo, aunque pronto será verano.
Aunque la brisa entre por mi ventana, un aire caliente... Yo siento frío.
Ahora mismo, no me importaría morir.
Ahora mismo, no me importa nada.
Nada de nada.
No busco respuestas.
No busco una salvación.
No busco nada.
Vivir por vivir.
Luchar por luchar.
Escribir para nada en concreto.