Adiós con la espera.

Después de todo, soy incapaz de creer en cuentos de hadas, en historias de amor verdadero.
La tragedia es tan bonita cuándo se lee o se observa en un echo ficticio... ¿Pero que pasa cuándo sucede de verdad?
¿Esperar al amor de tu vida?
¿Para qué?
No llegará con el caballo blanco a salvarte, ni te dirá al cabo de no se cuantos años que no ha podido dejar de pensar en tí, y que te necesita.
¿Y que pasa con ese tiempo ausente que en los libros ni los menciona? El tiempo pasa tan rápido cuándo es leido o visto...
¿Pero y que pasa cuándo es real?
¿Que pasa con ese dolor tan intenso?
¿Para que esperar a la persona que más has amado en esta vida si ni siquiera sabes si llegará?
Y aunque vuelva... ¿Para que regresar con esa persona después de todo el daño que te ha causado?
Ya no creo en los cuentos de hadas, ni en las historias de amor...
Sí, soy idiota y aún mi corazón te espera, aún mi corazón llama tu nombre...
Pero no puedo permitirme el lujo de que acapares también mi mente.
Pues sé que no regresarás.
Y aunque lo hagas, ¿qué pasa con todo este tiempo de sufrimiento que he pasado?
¿Para que seguir sufriendo por alguien que ha dañado mi corazón?
¿Y porqué no darle mi corazón a otra persona que realmente se lo merece?
Aunque no sienta los mismos sentimientos, ni de lejos, pero se lo merece...
Y realmente, puede sonar egoísta, fría, cobarde...
Pero si te sigo esperando, no sé que va a ser de mi vida.
¿Y para qué hacerlo si me has hecho tanto daño?
¿Y para qué hacerelo si ya me has olvidado?
Aunque, quién sabe si es verdad que lo has hecho...
Tan sólo sé que no puedo esperar por el simple echo de que aún tengo esperanza...
No.
La esperanza ya no es lo más importante ahora. Ahora ella no manda.
Ni mi corazón.
Ahora tan sólo manda mi mente, mi confusa y destrozada mente...
¿Podré olvidarte entregándole mi roto corazón a otra persona que se lo merece?
Lo dudo mucho...
Pero aún así, tengo que seguir con mi vida.

Perdóname.


Ruka.